Razones de salud, filosofía de vida y defensa por los animales los impulsan a no comer algunos alimentos. Procure conocer las listas de intercambio para evitar malnutrición.
"Tengo 22 años y no sé qué sabor tienen las carnes rojas, blancas o los embutidos. Soy vegetariana y aunque me encantan los animales y siento compasión por ellos, esa no es es la razón principal de mi vegetarianismo. Mi motivo es la repulsión que me genera la textura, el olor y la apariencia de las carnes", cuenta Alejandra Gutiérrez.
El vegetarianismo y el veganismo se están imponiendo como un estilo de vida alrededor del mundo, pues cada vez son más quienes adoptan esta cultura. Algunos consideran que lo hacen por salud, otros por protección a los animales y otros porque desde que nacieron, no se acostumbraron a consumir proteína animal ni sus derivados.
"El vegano excluye por completo los productos de origen animal, mientras que el vegetariano consume leche, queso y yogur. Ambas dietas, desde que estén bien planificadas, son apropiadas para todas las etapas de la vida, porque proporcionan beneficios para la salud", asegura la nutricionista Alejandra Calderón.
Sin embargo, el estilo de vida saludable con base en frutas, verduras y gluten (proteínas extraídas de la harina de los cereales, el trigo y la cebada), también puede perjudicar el organismo, ya que según la nuticionista: "A veces se exceden en el consumo de carbohidratos presentes en la papa, el arroz y el pan, y pueden sufrir de hipoglicemia. Además son propensos a padecer de depresión y enfermedades mentales".
Dificultades
"En un mundo de carnívoros es difícil ser vegetariano, sobre todo cuando se es el único en la familia con esa característica, cuando no hay muchos sitios vegetarianos y mucho más cuando no sabes cocinar", indica Gutiérrez.
Otra de las desventajas que posee este estilo de vida, es que las personas que lo practican deben cuidarse mucho, ya que al no saber combinar apropiadamente los sustitutos de las proteínas animales pueden padecer deficiencias vitamínicas y minerales.
Para la especialista en medicina ayurvédica, Mónica Gómez, el problema que más padecen los veganos es la deficiencia de la vitamina B12 (también llamada cobalamina), que no se encuentra en ningún producto vegetal, por eso padecen anemia cuando no consumen suplementos vitamínicos.
En cuanto a los niños pequeños, Gómez no recomienda privarlos de las proteínas que ofrecen las carnes y los lácteos, pues la deficiencia de estos nutrientes afectan la formación de los huesos, los órganos y el cerebro.
Combinaciones
"Entre más restrictiva sea la alimentación, se debe planificar con más cuidado porque ninguna dieta por más equilibrada que sea, garantiza la salud", asegura Valentina García, quien es vegana hace cinco años a causa de artrosis reumatoide.
Según la nutricionista Elizabet Ortiz Palacio, en las proteínas vegetales se encuentran todos los aminoácidos esenciales, pero en cantidades insuficientes. Por esto se pueden mezclar diferentes fuentes de proteína vegetal para obtenerlos de manera apropiada formando una proteína nutricionalmente completa. Ejemplo de ello es el fríjol con arroz, o la soja y la quinua.
El hierro es otro nutriente difícil para lograr un suministro adecuado. Entre las fuentes están la espinaca y las ciruelas.
Para las deficiencias de vitamina B12, complejo B, calcio y zinc se incluyen tallos de apio, espárragos y champiñones y se debe incluir todas las frutas ricas en estas vitaminas, minerales, fibra, agua y antioxidantes.
"No importa cuál sea la fuente que provee los requerimientos nutricionales diarios, lo que sí es esencial para la salud es que estos cubran sus necesidades individuales", concluye la nutricionista.
Beneficios
Mónica Gómez aclara que las personas que no consumen carnes ni productos derivados de los lácteos, tienen otras ventajas pues poseen un sistema digestivo más saludable y tampoco tienen problemas con el aumento del colesterol malo y los triglicéridos. Pero sí les recomienda consumir grasas, como por ejemplo omega 3 que mejora el funcionamiento del cerebro.
"Esta dieta es muy rica en fibra, lo que favorece el tránsito intestinal y previene determinados tipos de cáncer como el de colon y recto. Por otro lado, hay una menor incidencia de obesidad y menor riesgo de llegar a padecer diabetes tipo dos", señala Alejandra Calderón.
Consejos
1. No olvide que los frutos secos como el maní, almendras y marañones representan un gran aporte nutricional y brindan saciedad.
2. Recuerde que los vegetales entre más cocidos, más nutrientes pierden.
3. Balancee la dieta con alimentos como el fríjol, lentejas, nueces, arroz, y productos de soya como el tofu y el tempeh.
4. Para obtener una fuente de calcio, acuda a los cereales fortificados para el desayuno, productos de soya y algunos vegetales de hoja verde.
5. Las frutas y vegetales enteros son los más convenientes en las dietas vegetarianas. El rojo, el naranja y el verde funcionan como una clave, ya que las vitaminas y fitoquímicos que les dan a las plantas el color y su tonalidad brillante trabajan como antioxidantes, mejoran el sistema inmunológico y trabajan como antiinflamatorios.
6.Elija siempre productos integrales que contienen el germen y el salvado sin procesar, pues son ricos en fibra, antioxidantes, vitaminas y minerales.
7. No olvide incluir hierro, zinc y vitaminas B12 en su alimentación.
8. Los alimentos altos en fibra ayudan a controlar el hambre, disminuir el colesterol, y a mantener saludable la digestión. Cambie el pan y las pastas por variedades 100 por ciento integrales. Remplace los cereales por salvado o avena.
9. Consuma la cáscara de las frutas como pera, manzana y uvas, ya que la fibra está dentro de ellas.
Ejemplo de vida natural
"Me volví vegetariana porque hace 16 años me diagnosticaron cáncer de colon de primer grado. Fui a un médico naturista y me indicó que para poder curarme debía dejar de consumir carnes de todo tipo. En un año volví a la EPS a hacerme los exámenes y milagrosamente estaba sana...
Esto ha sido un testimonio muy grande sobre lo que significa ser vegano, porque ahora lo hago para ayudar al planeta, además por tener misericordia con los animales", cuenta Patricia García, propietaria y fundadora del restaurante Orellana, un lugar de comida natural y netamente vegetariana.
La mujer de 41 años asegura que diariamente van 60 personas a almorzar un menú compuesto por: fríjoles con chicharrines (hechos con gluten), arroz blanco, ensalada, croqueta de verduras, plátano verde y mazamorra con leche de soya.
"Tratamos de variar el menú todos los días. Entre los productos que un cliente vegetariano puede encontrar están los tamales de gluten, lechona con carve, pescado de soya, muslos de soya, gluten bbq, hamburguesas de garbanzo y rollo de granos", indica García.
Tipos de vegetarianismo
* Los veganos son aquellos que excluyen todos los productos animales y sus derivados.
* Los lactovegetarianos consumen vegetales y algunos productos lácteos.
* Los lactoovovegetarianos consumen leche y sus derivados, huevos y vegetales.
* Los semivegetarianos incluyen los vegetales, consumen pollo o pescado y solo excluyen carne roja.
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